miércoles, 17 de octubre de 2018

Una noche inolvidable (segunda parte)



Al abrir las puertas del ascensor, la inmensidad del recibidor daba paso al comedor, era impresionante, cada uno de los detalles que cubrían  los  rincones de la estancia llamaban su atención, sin prisas, disfrutando cada instante la música que acompañaban sus pasos hasta la entrada del buffet donde se encontraba  un atractivo camarero recibiéndolos  con una copa de champán.

Su acompañante la sorprendió con una rosa roja, brindaron por el momento,  haciéndola sentir una mujer afortunada ante las miradas celosas de cada una de las chicas que esperaban la entrada a la cena.

La amplia sonrisa de la camera los acompaño hacia la mesa que él estratégicamente había reservado.

Bajo una cristalera azul cielo, el agua recorría cada uno de los paneles que los cobijaban.

Ella deposito la frágil flor sobre la mesa, aunque nerviosa por ser el centro de atención de todas las miradas, acepto su invitación recorriendo el estupendo buffet con el que los agasajaban, como un caballero, pidió bebida para ambos, no había duda, sabia como ejecutar su papel, haciéndola sentir una mujer especial.




Observaron el menú celosamente, sin dilación él chico decidió por ambos, escogería una porción de cada una de las propuestas  sugeridas por el chef.

Se dedicaron a disfrutar de la cena y la buena conversación que mantenían, no sin darse cuenta de las indiscretas miradas que los acompañaban toda la velada.

El tiempo transcurrió sin apenas percibirlo, fueron los últimos en abandonar el comedor.

Tras la puerta del hotel, una melodía amenizaba el ambiente con bailes del ayer y las más modernas melodías del momento.

Sin dudarlo, se dirigieron al centro de la pista, dejándose llevar con cada una de sus notas, el sensual baile del chico, despertaba lascivas miradas femeninas que la hacían sonreír. A cada movimiento de él,  la cercanía entre ellas y su acompañante era cada vez menor.

El calor continuaba siendo sofocante, apetecía relajarse, decidieron subir a la habitación del hotel y tomar una copa contemplando el oleaje de la mar, casi en silencio disfrutaron el momento






El paseo marítimo se encontraba concurrido de centenares de personas que disfrutaban de la brisa marina,   a su paso una famosa franquicia ofrecía sus mejores helados llamando su atención, entre ellos no había dudas, estaban disfrutando la noche y decidieron darse un capricho.

La discrepancia de la variedad del surtido los entretuvo sin percatarse de las miradas curiosas a su alrededor, un simple comentario intencionado dejo perplejas a dos chicas haciendo más hincapié en la relación que mantenían.






Frente al él, un espejo reflejaba su perfil, un perfil varonil.  El paseo marítimo se convirtió exclusivamente en un lugar privado, donde solo los dos compartían momentos únicos.


Al final de la bahía el local de moda…..


                                                                             Enmanuell L 17 de Octubre de 2018

2 comentarios:

  1. Siempre despertando interés y morbo con tu buena narrativa. Espero con ganas la continuación.

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  2. Me tienes en ascuas. ...
    Me encanta
    Ya sabes , mi imaginación es fácil
    Mil besos preciosa 😘

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