domingo, 29 de enero de 2017

El deseo de una cita ( primera parte)

Es uno de los días más fríos del año, tras el ventanal,  el día me saluda con destellos rojos y amarillos, es el principio de un día muy esperado.

Miles de pensamientos no me han dejado dormir, desde las tres de la mañana,  recorro el mismo camino que mi cita.

Mis  nervios afloran cuando él  sale de su casa, cuando llega al aeropuerto,  al despegar su avión creo despegar con él. Me relajo dándome una larga ducha.

Me miro al espejo, demasiado tiempo entregándome a mi vida cotidiana, nada de lo que mi armario me ofrece me convence, sé que le gusta y que desea.

Un nuevo mensaje me avisa, ha llegado bien a la capital y se dirige  a la estación de tren.
Su cercanía incrementa el nerviosismo que me provoca, decido cubrir mi cuerpo con una toalla y hacerme un café.  Respiro una y otra vez intentando  disfrutar  el amanecer.

Sonrío, quiero darle una sorpresa y decido acudir antes a la cita, solo un par de horas me separan de él. 

Frente al espejo, impregno mi piel con mi body milk, recorro cada centímetro pensando que son sus manos  las que me miman. Seco mi cabello dejando que sean mis dedos los que den forma a cada mechón. Me dirijo a la habitación, es hora de decidir cuál será la prenda que él desprenderá de mi cuerpo.

Dedico el tiempo necesario a vestirme, deslizo mis dedos cubriendo mis piernas del  sutil negro de mis pantys.  El gris de la minifalda hace juego con mi ropa interior.  Subo la cremallera de mis botas, recorro la habitación nerviosa.  

Veinte minutos después me encuentro en la estación de tren, el frio es estremecedor,  el horario ha cambiado, una hora de retraso frustra mi intención de sorprenderlo.   El revisor hace más ameno  el viaje, en breve estaré  en mi destino.





Enmanuel  L 30 de Enero de 2017

jueves, 5 de enero de 2017

Te enamoraste de mi

Te enamoraste de mí, pero la verdadera pregunta es, quién sabe cuándo te has enamorado. O si lo has hecho.
Cuándo sucedió, quiero el momento preciso.  Fue cuando te llamé esa vez sin más?
O cuando no te llamé por teléfono por orgullo?
Cuando te perdí que hora era? Pasó de día mientras trabajabas, o en la noche cuando no podías dormir?
Cuando dejamos de ser un "nosotros" y te convertiste en un "yo"... y no hablo del momento en el que me miraste y me lo dijiste con tus ojos..., me refiero a cuando ya habías decidido por mí también.
Miro hacia atrás y nos veo como una película, trato de imaginar tu expresión, el momento exacto en el que pensaste que yo ya no era yo, la mujer para ti.
Quizá fuera ahí, mientras yo me reía y tú estabas un poco triste pero yo estaba tan contenta que no me di cuenta. O, mi amor, fue antes?
Voy aún más atrás.
Tal vez fue esa pelea donde te pedí muchas veces perdón y tuviste náuseas o mirando a tu alrededor te diste cuenta que podías conseguir algo mejor.
Quizás te desenamoraste cuando tu caricia pasó de la pasión a convertirse en dulzura, cuando ese traje que te gustaba de mí era sólo tela, aunque fuera caro.
Todavía no tengo claro si puedes prescindir de mí. No, no se deja a una persona por eso, se deja cuando sabes que puedes estar mejor sin ella, de lo contrario no sería tan malo.
Cuando sucedió?
Y sobre todo, cómo no pude darme cuenta?
Pero ahora decido yo. Y eso, todavía no lo sabes...