Vuelve a llegar la noche, intento cerrar mis ojos, tu imagen
vuelve a mi mente.
Me distrae, me entretiene, siento tu aliento en mi cuerpo,
me estremezco, me compadezco.
Soy aliada de tu lujuria, de tus juegos, de tu insaciable
furia al hacerme tuya.
Perderte me parece tan incoherente, mantengo mi mente
engañada, mi sonrisa ante la gente.
El deseo se hace permanente, el insomnio me pretende, la noche
se alargara tristemente.
Dejare que esta noche, tu recuerdo, sea mi dueño nuevamente.
Enmanuell L 2 de Diciembre de 2014
Llega la noche y el silencio se vuelve eco de la esencia de sus palabras, y el deseo te llama, y tu cuerpo vibra, y la noche se mece entre tu alma.
ResponderEliminarPreciosa entrada, Emmanuell, descubrí tu blog a través de un amigo común.
Un placer haber estado aquí, disfrutando de tus letras.
Un beso.
MARIA Y ENMANUELLE
ResponderEliminarNo sabéis como me alegro de que podáis disfrutar mutuamente de vestras letras porque pienso que sois muy buenas en vuestras letras, de donde aprendo cada día y donde me asilo en lectura.
La noche esa aliada del silencio que invoca a Los pensamientos y recuerdos, Que revolotean en la oscuridad dispuestos a colarse en nuestros sueños.
ResponderEliminarUn besazo para ti escritora.